Una disminución del porcentaje de robos nos hace un país más seguro a efectos estadísticos, pero ello no quiere decir que haya disminuido el número de delincuentes o personas dispuestas a delinquir.
No debemos bajar la guardia en este aspecto, y como presentamos en nuestra web el primer paso es prevenir para posteriormente disuadir. Nunca sabemos si nos va a tocar a nosotros, pero si ponemos medios estaremos poniéndoles las cosas más difíciles.
Desde enero a marzo de 2015 se han registrado en España un total de 496.133 delitos y faltas, lo que constituye un 3,7% menos con respecto al mismo período del año 2014, cuya cifra ascendía a 514.930. El total de las infracciones penales registradas durante los tres primeros meses del año conduce a que la tasa de criminalidad sea de 44,3 delitos y faltas por cada 1.000 habitantes y convierte a España en uno de los países más seguros de nuestro entorno.
La bajada del total de los delitos y faltas registrados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad durante el primer trimestre de 2015, tal y como demuestran los resultados presentados en este Balance, determina y pone de manifiesto una continuidad de la tendencia descendente registrada los últimos años, manteniendo a España como un referente internacional en la lucha contra la delincuencia. Cabe señalar que la eficiente utilización de los recursos policiales constituye uno de los principales instrumentos para prevenir, combatir y reducir los índices de criminalidad de nuestro país.
El descenso de los índices de la criminalidad es generalizado, si bien esta disminución es mayor en cuanto a lo que respecta a los homicidios dolosos y asesinatos consumados (-25,0%), los robos con fuerza en domicilios (-15,9%), los robos con violencia e intimidación (-15,5%), la delincuencia violenta en general (-14%), y los robos con fuerza (-12,2%).
Por último, merece destacar, desde una distribución territorial de la criminalidad, que entre las comunidades autónomas donde ha tenido lugar una mayor disminución de la criminalidad se encuentran La Rioja, Asturias, y Cantabria.

Fuente: Diario La Razón